La arquitectura sustentable ha tenido lugar desde el año 1987. El término fue acuñado a la ex primer ministro noruega Gro Brundtland, quien en el informe “Nuestro futuro común” presentado en la 42a sesión de las Naciones Unidas de ese mismo año habló del desarrollo sostenible.
Desde entonces el concepto de arquitectura sustentable ha sido directamente vinculado al desarrollo sostenible. Este último, de acuerdo con Brundtland, se da cuando:
Se satisfacen las necesidades de la presente generación sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para que satisfagan sus propias necesidades.
Arquitectura sustentable
Un proyecto arquitectónico que busca ser considerado como sustentable debe concebir su diseño minimizando el impacto ambiental.
Los materiales utilizados dentro de un proyecto sustentable consideran el ciclo de vida de los materiales utilizados; favoreciendo el uso de materias primas y energías renovables. Adicionalmente, cuida el uso de recursos naturales, su explotación y la destrucción o el reciclaje de los residuos.
La arquitectura sustentable, no solo favorece el cuidado del medio ambiente, también ayuda en la reducción de costos en el largo plazo. Integrando materiales sustentables como el uso de paneles solares, la reutilización de aguas grises y la implementación de ecotecnias los propietarios de los proyectos pueden ahorrar hasta un 50% en gastos de mantenimiento y servicios.
Certificación LEED
Como miembros del U.S Green Building Council, en Alpha Hardin tenemos el compromiso de apostar por la construcción ecológica y sostenible. Prueba de ello, es que desde 2013 hemos logrado certificar aproximadamente 15 de nuestros proyectos.
La certificación LEED es el acrónimo de Leadership in Energy & Environmental Design, que se traduce en español como Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental. Es otorgado por el U.S Green Building Council y tiene diferentes niveles de certificación que son alcanzados cuando se cumplen ciertos lineamientos. Luego de una evaluación se asigna el nivel de certificación de acuerdo a los puntos obtenidos:
- Certificación (40 a 49 puntos)
- Plata (50 a 59 puntos)
- Oro (60 a 79 puntos)
- Platino (80 puntos o más)
¿Cómo se evalúa un proyecto para certificación LEED?
Un proyecto que busca una certificación LEED, debe someterse a una evaluación que considera:
Ubicación y transporte: A fin de incentivar la disminución del uso del auto y favorecer la movilidad alternativa como las bicicletas o el transporte público.
Sitios Sustentables: Apuesta por las construcciones que evitan la sedimentación y erosión y buscan el cuidado y la restauración del hábitat.
Eficiencia en agua: Su objetivo es el máximo aprovechamiento del uso del agua. Aquí el proyecto arquitectónico debe considerar el tratamiento, captación, reutilización y ahorro del agua.
Energía y atmósfera: Favorece la eficiencia energética.
Materiales y recursos: Evalúa el uso de materiales y recursos. El proyecto debe dar prioridad al uso de materiales reciclados y cuidar el manejo de los residuos propios de la construcción.
Calidad de ambiente interior: Privilegia los proyectos que cuidan la salud y bienestar de sus ocupantes. Además de la implementación de acciones que consideren la renovación del aire interior con una adecuada ventilación, una temperatura confortable, entre otros aspectos.
Innovación: Exhorta la mejora constante de las estrategias implementadas.
Prioridad regional: Califica los proyectos de acuerdo a su impacto en la disminución de la huella de carbono. Favoreciendo a los que evitan el uso de materiales que se fabriquen o transporten desde largas distancias; así como la promoción del desarrollo sustentable.
Estadísticas del impacto de la arquitectura sustentable
El sector de la construcción es el responsable del mayor consumo de combustibles fósiles y recursos naturales en el mundo. De acuerdo con el Informe de estado global 2020 sobre los Edificios y la Construcción, elaborado por el programa del medio ambiente de la Organización de las Naciones Unidas; el sector de la construcción fue el responsable del 38% de las emisiones globales de CO2 durante el 2019.
Fuente: Informe de estado global 2020 sobre los Edificios y la Construcción
De ahí la importancia de que la planeación, el desarrollo del proyecto arquitectónico y la construcción busque la implementación de mejores prácticas.
Desarrollar proyectos sustentables, garantiza la preservación y cuidado del medio ambiente. Pero además, como hemos mencionado, representa importantes ahorros para los propietarios.
Ahorro energético
Una de las tendencias dentro de la arquitectura sustentable es la incorporación de paneles solares. Estos representan un ahorro importante en los consumos de electricidad y apoyan el uso de la energía limpia.
De acuerdo con Martín Mendoza, director de Suministrador Servicios Básicos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); durante el primer cuatrimestre del 2021, las tarifas del sector industrial, comercial y de servicios públicos aumentaron un 5.4%.
Se espera que estos aumentos continúen y lleguen a un 8% para el mes de septiembre de este mismo año. Por lo que incorporar paneles solares dentro de un proyecto ayuda a las empresas a generar y consumir su propia energía; logrando así importantes ahorros y garantizando el rápido retorno de la inversión de su instalación.
Adicionalmente, la incorporación de paneles solares ayuda en la disminución de emisiones de CO2 y es 100% deducible de impuestos para las empresas. Por si esto fuera poco, también ayudará a que los proyectos obtengan certificaciones ambientales que apoyen su reputación corporativa como Empresa Socialmente Responsable.
Tratamiento de aguas residuales y captación de agua de lluvia
El agua ha sido durante las últimas décadas, la mayor preocupación del desarrollo sostenible, y es que este líquido es vital para el ser humano. Por esta razón, incorporar tecnología que permita cuidar y preservar el agua se ha vuelto una clara tendencia en la arquitectura sustentable.
La implementación de plantas de tratamiento o sistemas de captación de agua pluvial son solo algunas de las opciones que los desarrolladores han implementado para volver más eficientes sus proyectos arquitectónicos.
Disminuir el consumo de agua, también representa para las empresas la reducción del pago de la misma. Tan solo en la Ciudad de México, se puede pagar una cuota fija bimestral que va desde los $2,811.01 para tomas de 13mm de diámetro, hasta más de 7 millones de pesos bimestrales para tomas que superan los 300mm.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, se prevé que en 2030 el mundo viva un déficit mundial del 40% de agua si las condiciones climáticas se mantienen como hasta ahora; por ello la relevancia de incorporar tecnología que favorezca el reúso y máximo aprovechamiento del agua.
Otros beneficios de la arquitectura sustentable
A diferencia de lo que se suele pensar con frecuencia, una construcción sustentable no necesariamente es más costosa. Aunque pudiera representar un costo adicional asociado a la incorporación de tecnologías verdes; este tendrá un retorno de inversión en el corto plazo, gracias a los importantes ahorros que se tendrán en la operación y mantenimiento del proyecto.
Adicionalmente, a los beneficios económicos y medioambientales que representa la arquitectura sustentable, se suman otros como:
● Mayor valor de mercado
● Reputación Corporativa
● Salud y bienestar de los ocupantes
● Mayor productividad
● Menor depreciación
● Mayores precios de venta y/o arrendamiento
Si deseas desarrollar un proyecto sustentable, en Alpha Hardin contamos con la experiencia necesaria para hacerlo realidad.
Dentro de nuestra estrategia de negocios; consideramos primordial integrar acciones y programas que estén alineados al desarrollo sostenible. En este sentido desde el 2018, nos adherimos al Pacto Mundial de las Naciones Unidas incorporando sus 10 principios y 17 objetivos de desarrollo sostenible a nuestra estrategia de negocio.
Además contamos con la Certificación de Empresa Socialmente Responsable y somos miembros del U.S Green Building Council.
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